Ya es un mes...

... y no me atrevo a dar la cara. Es la cobardía de enfrentar el dolor comunal. El aceptar frente a otros que 'nunca más'. Es algo que no me atrevo a decir en voz alta, no desde que mi tía abuela murió, que viví el proceso de su degradación. Tres meses llorando todas las noches y aun no lo supero. Esto duele igual y me da más miedo

Del cómo decir adiós...

Lunes en la mañana. Me entero por un mensaje en el muro de una amiga, que ha muerto. Comienzo a buscar en los muros de todos los amigos para saber qué ha pasado. Malú me textea poco después, no solo ella murió. La madrugada del domingo Diana, Carlos y cuatro amigos más sufrieron un accidente en av. Tlalpan. Todos murieron...

No se qué pensar, lo primero que me vino a la mente fue nuestro gran amigo en común, la razón por la que volví a tener contacto con ellos después de la prepa. Me siento muy mal por ellos, pensar que la vida se va en un instante; ahora me siento peor por el, no me imagino perder amigos tan cercanos en una noche.

En medio del shock me invade la impotencia, un conductor alcoholizado de 22 años mató a seis personas, seis amigos que nunca más volveremos a ver, a tener noticias de ellos, ni a encontrarnos en la calle paseando. Todo por la falta de responsabilidad de una persona que después de ponerse hasta el dedo, tomó el volante y metió el pedal a fondo.

Este mundo es una mierda.

Adiós Charly y Diana. Me la pasé muy bien con ustedes :)

De cómo llegó Tigri

Un domingo en que se fue la luz en la condesa por toda la tarde, después de 5 horas picándonos los ojos René decidió que saliéramos a la plaza que esta en Insurgentes para ver si ahí si tenían luz y distraernos un poco en el cine. No fueron ni dos cuadras las que caminamos cuando nos encontramos una gatita sucia y flaca llorando, me agaché con intención de acariciarla y esta se acercó a mi, nos quedamos acariciándola un rato cuando le dije a René que le demos algo de comer, fuimos por croquetas y agua, se lo acabó. Después de un rato pensando qué hacer con ella decidimos llevárnosla. La metimos en el cuarto de servicio del departamento de René, en cuarentena. Se echó poco menos de una semana en casa de René, poco a poco mejorando. Ahora la traje a mi casa y esta cada vez mejor, con croquetas de prescripción pues los bichos que tenía en la panza le dejaron muy delicado el sistema digestivo, tomando Yakult diario para restablecer su flora intestinal y acostumbrándose a vivir con una gata más (mi Tuni, que esta un poco desconfiada de ella). Pronto la dejaré salir del cuarto (mi estudio) para que ande libre por la casa, espero que el proceso de adaptación entre Tuni y ella sea rápido pues las dos son un amor y me encantaría que fuesen hermanitas (debido a que nadie la quiere adoptar...)

Esta es Tuni, la gata sana que hace yoga y come (roba) fruta.

Esta es Tigri, nuestra refugiada y espero pronto nuevo miembro de la familia.

A los chicos que crecemos solos con nuestras madres se nos pone una cara rara, como más de mayores

Paseando una madrugada por Coyoacán, tomando un café del jarocho con René me vino a la mente otra noche, una de tantas conversaciones que tenía con David, recordé el momento en el que los dos dijimos a la par la frase de Esteban en 'Todo sobre mi madre'. Me di cuenta que extraño a esos amigos y extraño aquel momento en el que tenía una idea, una ilusión de lo que sería de mi vida, que ahora ya no se si gira o se ha estancado.

Extraño el poder pasar un dia entero hablando de cine...

De la pesadilla del examen de historia

El sábado en la mañana no podía despertar, René se dedicó a hacerme cosquillas en el cuello y en la nariz. No despertaba.

Dentro de mi sueño estaba molestandome con él porque no me dejaba terminar mi examen de historia, era inentendible y lo peor de todo es que era de la clase de la maestra Padierna, quien me orilló a hacer un mega acordeón en hojas de acetato (y terminé vendiendo las copias jeje).

No solo eso, sino que también debía terminar de ensayar mi papel de La Muerte en la obra de teatro de Macario, que debíamos presentar en la noche de ese mismo día.

Definitivamente una de mis peores pesadillas, no supera la recurrente de los sicarios en el pueblo en el que iba a cubrir un fotoreportaje, pero si muy angustiante; cuando logré despertar René ya se había dado por vencido y estaba jugando un rpg en la computadora.

Odio esas pesadillas...

Placeres simples

Una tarde que no quisimos hacer de comer y salimos a un restaurante cerca de casa de René, no le gustan los jitomates, por lo que siempre los pasa a mi plato, pero para hacerlo más divertido, hizo una carita sonriente.

Anatomía de un linograbado

'Anatomy of a Linocut' es el título de este video, hecho por Bill Fick.
Verlo me dio nostalgia y honestamente algo de envidia jeje, mi técnica de impresión es mucha paciencia, un brazo musculoso y el respaldo de una cuchara metálica. He usado tórculo algunas veces, cuando estaba en los talleres de la Esmeralda, y aun así el tórculo de la escuela esta muy viejito y hay que tratarlo con cariño para que no se descalibre. Anyway, se que en un par de años podré costearme un taller decente y quizás hasta herramientas así de geniales.
Enjoy!

Anatomy of a Linocut by Bill Fick from Jim Haverkamp on Vimeo.